El día 16 de marzo, Almu cumplió 18 años y antes de que se diera a la fuga con sus amigos, tuvimos una cena maravillosa en estricta familia. La familia sagrada es aquella a la que tu eliges para continuar tu camino, aquella que está contigo siempre que la necesitas, siempre que hay algo que celebrar, donde todo fluye, donde dando igual las edades, consigues crear ese ambiente familiar de compartir, de risas, de confidencias, bromas e inmenso amor, donde dejas por momentos los dolores de cada uno para juntarnos en un grupo que te llena el corazón.
Echamos de menos a Sabera, que anda sus caminos por Londres, viviendo sus propias experiencias, también a nuestra querida Deybbi que nos acompañaba desde la distancia. Me parece mentira que ya estén todos tan mayores!! El año que viene Lucia estará en Estados Unidos, pero seguiremos unidos celebrando cada momento juntos. Gracias Natalia, hermana de cuna por venir y aportar tanta alegría y tanta frescura, gracias Carmen y Alfonso por estar siempre a mi lado incondicionalmente... gracias niñas, os adoro, gracias Pau, eres lo mejor.
Me encanta haber hecho una nueva familia, claro que eché de menos a mis padres, a mi hermano Leo... pero me sentí inmensamente feliz. Y eso hoy quiero reflejarlo como no podía ser de otra manera.
Todo mi amor,
Almu
