martes, 10 de mayo de 2016

Para ti Pau




Querido Pau,

Hoy mi entrada del blog es para ti que siendo tan importante para mi como tus hermanas, eres el mayor, el primero, casi nada.
Esta semana te graduas, acabas el colegio y te juro que me parece que fué ayer cuando te acompañaba por primera vez a la guardería, cuando te prometía que me quedaba en la puerta y que no me iba a mover, cuando te quitaba kilos de tierra de tus minúsculas zapatillas, cuando te veía subir las escaleras con tu mochila en la espalda en tu primer colegio.
Esta entrada es para ti porque he de agradecerte muchísimas cosas, entre ellas estas pinceladas:

Me convertiste en madre llamándome mama por primera vez.
Me regalaste la mirada y la sonrisa más tierna que se puede recibir en esta vida.
Todo fué fácil contigo, tanto que repetí tres veces más.
Me enseñaste a ser amorosa y firme ante tus llamadas, a ser fuerte a través de tus miedos, a no rendirme a través de tus pasos, a perdonarme ante mis errores. Siempre eres amable y amoroso, las quejas en ti no existen. Eres honesto y sincero en tus palabras, no excluyes a nadie ni te enredas en lo exterior.

Me enseñaste a ser médico, payaso y profesora, a contar cuentos y a jugar. Me diste papeles que desconocía, como el de guardaespaldas, maga, policía, loca madre defensora y dibujante. Saboreabas mis comidas y aplaudías mis tonterías, aprendías con emoción y saltabas de alegría en cuanto entraba por la puerta.
Amplié mi imaginación hasta extremos insospechados, decoré árboles de navidad y me convertí en Rey mago, Papá Noel y ratón Perez. Trabajé la paciencia y aprendí formas sencillas de abrochar los cordones, ponerte el abrigo y montar en bici.

Me reconcilié con las tortugas, los peces, los hámsters y los perros. Recordé canciones olvidadas para cantarte, me reí con tus primeros chistes desordenados, tracé caminos en tus platos de puré e inventé mil  formas con el queso y el membrillo. Compré los primeros uniformes, libros de colegio, te enseñé a sacar punta, a no salirte en los dibujos, a cortar con tijeras, a lavarte los dientes. Transformé tus baños con colores y muñecos. Descubrí nuevas colonias de bebe y te las puse todas. Te prestaste a todos mis inventos, hiciste de esparring de esta madre novata con un amor interminable. Aceptaste la llegada inmediata de hermanas, el color rosa y las muñecas, compartiste sin problemas.

Pau, Paz en catalán, siempre te llamo así porque eso representas en mi vida. Todo sencillo, todo fácil, todo en paz. Silencio en los viajes, lengua de trapo amorosa, preguntas sorprendentes, memoria de elefante, abrazo extensible de mis piernas a tenerte que mirar hacia arriba. De tomarte en mis brazos a que ahora me cojas tu mientras grito y me río.


Que suerte he tenido de que me eligieras como madre, que suerte de que a pesar de todos mis errores y las cosas que a veces te digo cuando me enfado, estés tan cerca. Mezcla perfecta de nuestras mejores partes, de tu padre bendito y de mi. Gran amigo, gran hermano, gran hijo que escuchas y atiendes y haces lo que te da la gana, como no podía ser de otra manera. Chico elegante y trabajador, que buscas tus propios recursos, que nunca he tenido que decirte que estudies, que todo lo que has conseguido lo has hecho tu, tu solo mi amor, tu solo mi Rey.

Quiero dar las gracias a la vida por verte acabar el colegio, y comenzar a pensar en lo que vas a estudiar, Te quiero hasta el infinito y más allá. Me llena de orgullo ser tu madre. Y ahora a seguir hacia delante, con tu equipo de fútbol y tus amigos, tus 18 años cumplidos, amores y todo lo que tu desees incluir en tu vida, con todos los que quepan en tu enorme corazón compasivo, generoso y lleno de perdón.

Un curso de milagros eres tú, mi maestro, mi hijo mayor, la paz de mi vida. Te adoro

Mama