viernes, 1 de febrero de 2013

El hilo rojo que nos une...

Según una antigua tradición china, "un hilo rojo invisible conecta a todos aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer pero nunca romper."

Mi hija pequeña y yo lo teníamos, la intuición me decía que sería madre de alguien lejano y en éste mes de febrero, hará 7 años que vi su foto por primera vez. Quienes hayan pasado por la experiencia de una adopción internacional, especialmente "la gran familia de padres adoptantes en China", sabrán perfectamente las distintas emociones que se sienten durante todo el proceso.

Lo que sientes al abrazar por fin a ese ser al que llevas tanto tiempo esperando es difícil de explicar con palabras. Pero cada día al cerrar los ojos, me vienen tantos y tantos recuerdos que solo puedo dar GRACIAS.

Mucha gente me ha preguntado si se quiere igual a un hijo biológico que a un hijo adoptado y quienes tienen la suerte de haber vivido una experiencia como la mía, de compartir familia con hijos de distintos rasgos, saben que SI.

El amor nada tiene que ver con la sangre, nada tiene que ver con los meses de embarazo, nada tiene que ver con los parecidos, nada tiene que ver con la piel. El amor es la fuerza más poderosa que existe y cuando es verdadero nada ni nadie puede romperlo.

Febrero es y será siempre su mes y el mío. Su hilo será siempre suyo y mío y el amor que compartimos será siempre nuestro.

Hoy, un buen amigo me preguntaba ¿quién da más a quién? y yo siento que en la maternidad, los hijos te dan tanto, que sería imposible devolverles, agradecerles,amarles lo suficiente. Adoptar es la fuerza que sale de dentro, el hilo rojo que te tira del pie mientras te estás duchando, mientras trabajas o lees, un hilo que no te deja, que te empuja a vencer todos los obstáculos, que te da un valor que desconocías. Adoptar es un regalo de la vida, es una lotería ganada, es una luz que te sigue allá donde vayas.

Todo mi cariño hoy a las familias adoptantes, a las que ya lo consiguieron, a las que están en camino y a las que sienten en éstos momentos "el hilo"... porque lo lograrán si así lo desean. Todo mi cariño a los que lo hacen posible, a los que nos acompañan, a los que a veces soportan nuestros nervios. Y todo mi cariño a los niños, a esos niños nacidos lejos, especialmente a ellos, que nos dan tanto.

almufuentes@gmail.com