viernes, 13 de diciembre de 2013

Un árbol de navidad natural, un gran regalo


Desde hace unos años, cada navidad, me regalo un árbol natural. Me costó vencer la creencia de que no merecía la pena, que era un lío, que los niños podían pincharse, que ensuciaba la alfombra, que era muy caro. Pero cuando sacaba el viejo árbol de plástico del trastero, algo en mi me decía que yo deseaba acabar con esas creencias.

Poner un árbol natural en casa me conecta con la tierra. Su olor invade el salón de naturaleza, de frescura, quedan tan bonitos decorados que merece la pena. Cuando acaba la navidad, lo llevo a un vivero y si ha sufrido con la calefacción de mi casa, rápidamente se repone. Los hay de todos los tamaños, los pinos son preciosos, los abetos lo son aún más.

Me gusta la tradición que inicié, cuidarlo y saber que es temporal, solo por unas semanas, que luego volverá a su entorno. Como es tu árbol de navidad? cuáles son tus creencias? te lo has planteado?

A mi me gusta compartir un tiempo con él, alegra la casa y da un toque especial a estos días... y observarlo me aporta paz y felicidad.

Almu Fuentes


miércoles, 4 de diciembre de 2013

El regalo de lo sencillo


Disfrutar de las cosas sencillas es un placer. Hace que regreses de esos viajes mentales a los que nos lanzamos cada día en forma de cohetes espaciales. Unas flores y estar juntos alrededor de una mesa, tomar consciencia del momento, atestiguar la presencia individual de cada Ser que te rodea. Soltar el juicio, dejar ir la necesidad de comparar, de exigir, de posicionar, en un perfecto baile de respeto y aceptación.

La vida es un teatro espontáneo, una improvisación constante sin guiones, un baile de papeles misterioso... sentarse y descansar, atestiguar, convertirme en espectador es un Regalo.


Almu Fuentes

miércoles, 27 de noviembre de 2013

Cuando hace frío y huimos


Cuando hace tanto frío, si podemos huimos... buscamos el calor del coche, el del hogar, el de la oficina, el de una tienda, entramos a tomar un café o lo que se nos ocurra, pero buscamos refugio. Muy pocas veces nos encontramos en lugares en los que no podemos huir y eso nos ocurrió anoche a un grupo de personas en un cementerio... El viento soplaba fuerte y helado, pero el cortejo seguía su rumbo, los rostros se paralizaban, las miradas se entendían entre ellas sin necesidad de palabras y las manos se escabullían por el primer rincón que encontraban.

El verdadero frío es aquel del que no se puede huir, lo demás es una aventura, lo demás es un juego. El frío que se adentra y te paraliza, el frío que no cede, que se ensaña, que amenaza, qué miedo da cuando hace tanto frío. Observé como las personas nos organizamos ante "ese frío", cómo recordamos de pronto el calor esencial, entonces, los brazos comienzan a rodear a los más afectados, salta la amorosa solidaridad humana. Los corazones se convierten en "estufas" que ceden el calor propio sin egoísmo. Es bonito ver el calor frente al frío, aunque sople el viento, aunque no dé tregua, aunque el cortejo no se detenga...

Abrigaros!

Almu Fuentes

miércoles, 20 de noviembre de 2013

La Señora Sangyong



Tengo mi coche de taller en taller desde hace más dos meses... mi coche no es un coche cualquiera, es la Sra. Sangyong, mi compañera del día a día, la que me escucha cuando hablo sola, la que se ríe conmigo cuando me llega la carcajada explosiva, la que sostiene mis lágrimas cuando aparecen. Es también la que aguanta mi enfado en un atasco, mi ansiedad cuando tengo prisa, la que aloja la compra pacientemente intentando que no se vuelque nada, y eso a pesar de mi falta de cuidado. La que siempre lleva más de lo que puede, más niños, más maletas, más animales,  más bolsas de Ikea...

Ella, la que tiene de todo, música, galletas, caramelos, chicles, toallitas mojadas, kleenex, y hasta cosas insospechadas. La que avanza valiente entre los coches para llegar a tiempo a recoger a los niños, la que me espera en zona verde o azul mientras descansa un rato. Es gris y grande, está un poco gorda, lo reconozco, pero así los niños se acomodan entre sus curvas cuando viajamos. Tiene buen carácter, un poco gruñona si se va quedando sin gasolina, pero lo aguanta todo, la arena de la playa, las tablas y el sol asfixiante en su espalda en los días calurosos de los veranos gaditanos.

Pues mi amiga la Sra. Sangyong no está con nosotros y la echamos de menos. Cuando pienso en ella no puedo evitar el miedo a que tenga alguna avería que no consigan reparar. Siento que la arreglan una cosa y cuando me la dan una y otra vez, se le ha estropeado otra... como una enferma cuyos médicos no consiguen dar con su dolencia. Estaba en un pequeño hospital, digo taller y finalmente decidimos su traslado a un gran hospital digo a la casa oficial... Cuánto se echa de menos lo que no se tiene!!

Y me pregunto... qué puedo aprender de esto? Lo primero que estoy ganando en paciencia, lo segundo que estoy consiguiendo aceptar lo que es. Lo tercero, darme cuenta de lo infinito que es el universo porque no he dejado de tener coche en los casi tres meses.


Hoy, quería hablar de Ella. La echo de menos, a fin de cuentas es mi compañera y amiga. Feliz miércoles!

Almu Fuentes

martes, 19 de noviembre de 2013

Respirar consciente es Verme


Respirar es sobrevivir, es inhalar la vida buscando aquello que necesitamos: el oxigeno. Respirar consciente es ir más allá, es adentrarse en lo profundo, es conectarse con la esencia, es re-conocer el espacio en el que podemos vernos, sentirnos, unirnos a esa "otra cosa" que con las gafas del ego no vemos, no sentimos, no percibimos.

Respirar consciente es abrirnos a un espacio de comprensión o de vacío, es morir y vivir a la vez, es entender y perderse, es luchar y rendirse, es calma, es paz, es silencio.

Cuando me siento a respirar de forma consciente, ME VEO, sé que estoy ahí. Cuando escucho a otra persona desde la misma actitud, LA VEO y sé que percibe que estoy ahí. A menudo me descubro en conversaciones rápidas que me empujan, en tsunamis de palabras que salen como la lava de un volcán, salen las tuyas, salen las mías, pero no nos vemos, tal vez ni siquiera sentimos que estamos ahí.

Escuché hace tiempo a Alejandro Jodorowsky decir que "somos felices aunque no lo recordamos", es verdad, a veces, muchas veces, me pierdo en mis necesidades, en mis quejas, en mis dudas, en mis miedos, en mis expectativas y olvido que soy feliz. Ser feliz para mi tiene que ver con el respirar consciente, con verme y saber que estoy ahí. Vamos a darnos momentos de consciencia, es barato, no tenemos que buscarlo fuera, basta con comenzar a seguir el ritmo de la música respiratoria y acompañarla desde el silencio, desde el ruido. Basta con verme en lo sencillo del aire que entra y sale, que me recorre y me acompaña, entonces, ya no hacen falta explicaciones, el comprender queda en otra dimensión y surge el "darme cuenta" de mi magnificencia, de mi oportunidad, de mis posibilidades. Respirar consciente es conectar conmigo para creer en mi y por fin VERME.

Almu Fuentes

domingo, 10 de noviembre de 2013

Compras y te haces feliz o infeliz?


Qué tipo de compradora eres? compras de más o compras de menos? tal vez no te lo habías planteado nunca? bien... pues es un buen momento para planteárselo porque, lo creamos o no, la forma en la que compramos habla de nosotros, nos da pistas de la forma en la que gestionamos las energías y sobre todo, del placer que nos aportamos a nosotros mismos.

Eres de las que compras por ofertas? dos cajas de leche que salen baratísimas, perfecto!! me voy a comprar 3 cajas... inicialmente me siento bien, si, siento que he ahorrado unos cuántos euros, pero luego viene la gran pregunta, necesito toda esta leche que he comprado? o se me acabará por estropear en algún rincón de la cocina?... y hablando de rincones, donde vas a guardar toda esa leche que acabas de comprar a un precio tan seductor? saltarás cada mañana por encima de ellas? como te sentirás entonces en cada salto que realices? Te has identificado? bien, si eres de las que compran en exceso guiada por las ofertas, puede ser el momento de aplicar unos momentos de atención plena. Recuerda que comprar solamente aquello que necesitamos sin exceso, nos aportará más tranquilidad y sobre todo menos incomodidad en el almacenamiento.

Eres por el contrario de las que compran por debajo de tus necesidades? un buen ejemplo es la pasta de dientes... eres de las que cada mañana te enfrentas al tubo retorcido de pasta de dientes y lo aprietas como si te fuera la vida en ello hasta conseguir poner una pequeña cantidad en tu cepillo? Y el gel? eres de las que lo ponen boca abajo porque llevas días sin acordarte de comprarlo o tal vez, eres de las que incluso, tiene que echar dentro del bote de gel un poco de agua, agitarlo fuerte como si tu cuerpo se viera sacudido por un recuerdo tribal?

Eres de las que salen a comprar una camiseta blanca nueva, porque TODAS las que tienes tienen el blanco un poco perdido, y vuelves a casa después de una tarde de compras con camisetas de todos los colores menos blanca? o tal vez eres, de las que sí vuelve a casa con la camiseta blanca y la sigues guardando en el armario para ponértela otro día? Y si no hay otro día...???

Y si esta entrada te ha hecho sonreír, qué te parece si revisas qué tipo de compradora eres, lo observas, lo sientes y comienzas a dar algún paso hacia un cambio? si?

Comprar bien nos da felicidad y sobre todo nos evita pequeños momentos infelices. Feliz Domingo!

Almu Fuentes

jueves, 7 de noviembre de 2013

Un hogar con olor a Cielo


Cada día, cuando entramos en casa, un olor nos recibe. Es el olor del hogar. Cada casa huele de manera diferente, no hay dos iguales. A todos nos pasa, la pituitaria está directamente relacionada con lo profundo, tal vez no nos hayamos parado a sentir, quizás no hemos puesto la suficiente atención, pero el olor está ahí, nos habla, nos cuenta que algo se está cocinando, espía al vecino que está pintando su casa o acuchillando el suelo. Nos provoca recuerdos el olor a chimenea tal vez de una casa lejana que ni tan siquiera identificamos. La naturaleza, las estaciones se filtran y participan también en el olor.

El olor se desprende de los pequeños rituales que llevamos a cabo, el olor a ropa recién lavada, a unas flores, a unas velas, a una colonia, incluso a un vacío. El olor nos habla cuando se ha fumado, cuando ha habido mucha gente, cuando hay animales, el olor se chiva de un pequeño descuido, de un experimento de los niños, de la presencia reciente de un amigo, de la visita amorosa de un ser querido.

Me encanta oler mi casa, giro la llave y entro y allí está, me abraza y me da paz, silencioso, sutil. Es solo un instante, luego uno se acostumbra y ya no lo siente, como todo lo bueno. Me gusta encender un incienso o una vela con olor a jazmín, cuidar el olor de mi ropa, la colonia de mis hijos, tener rituales olorosos que como fantasmas nos acarician y nos calman. Disfruto echando colonia a las camas, es sencillo, un bote de spray y unos toques mágicos sobre las almohadas, sobre las sabanas, para por la noche, al abrirlas volver a sentir el olor familiar, el olor a hogar.

Podemos poner atención en escoger los olores, recorrer los pasillos de un supermercado, abrir los botes y oler, sentir cual deseas para esa semana, uno nuevo que te inspire en ese momento, es un buen juego de atención plena. Comprar unas velas, probar nuevos olores, una crema para después de la ducha y un montón de cosas más.


Mi hija me contó ayer por la mañana, que a ella le encanta el olor de su casa y que sus amigas dicen, que nuestra casa "huele a cielo"... ¿puede haber una definición más bonita?

Almu Fuentes

miércoles, 6 de noviembre de 2013

Sí que me quiere... claro que me quiere


Con la llegada del otoño, me vuelve la pasión por las Margaritas. Acompañando a esa flor, me vienen recuerdos de la infancia... ¿quién no ha deshojado la típica margarita con una voz expectante: me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere?. Tengo que reconocer que yo, hacía trampas, pues si una de esas flores inofensivas me traía en forma de Oráculo un "no me quiere", rápidamente cogía otra para comenzar de nuevo hasta que el resultado final era un SI ME QUIERE.

La margarita fue la primera flor que yo aprendí a pintar, sencilla, elegante y fácil de manejar. Desde entonces, cada vez que imagino a una abeja, la veo encima de una margarita. Mis collares de flores fueron de margaritas, mis diademas para el pelo tenían siempre margaritas, algún vestido con margaritas también recuerdo...

Me encanta ir a comprarlas con la llegada del otoño, son baratas y de colores muy tierra y lo mejor, ¡duran eternamente! no hay que irse muy lejos, no hay que gastar mucho para poner un toque de color en nuestros espacios sagrados, comprar margaritas es un ritual que me alegra el corazón, que da calidez a mi hogar y me recuerda que SI ME QUIERE. Se le puede pedir algo más a una flor?

Almu Fuentes

martes, 5 de noviembre de 2013

El placer que el Ego no entiende


Estar en mi, estar conmigo. Reservarme ese espacio para sencillamente estar, Ser, sin escuchar música, sin leer, sin escribir, sin hablar por teléfono, conmigo, con mis pensamientos, con mis recuerdos, con mi forma de sentir, con mis emociones. Acomodarme en mi cuerpo, escuchar el silencio o el ruido sin juzgarlo, sin engancharme... QUE PLACER!

Con los años aprecio cada vez más ese espacio, cuando no lo tengo me resiento... pero me ha costado llegar hasta aquí. El miedo a la soledad se imponía, cuando todos se iban me entraba desasosiego, y ahora qué hago? qué hago yo sola?... me observo de lejos y me sonrío. Cuántos miedos inventados, cuántas penurias imaginadas, cuántas cosas me he mal contado a mi misma, cuánto daño me hice.

La soledad forma parte del vivir porque es necesaria, es el espacio en el que crecemos, es parte del alimento del alma, resistir, esperar, ver que siento sin asustarme, me ha llevado a comprender desde lo profundo. Me ha mostrado partes de mi que desconocía, se han forjado perdones, agradecimientos, ha brotado el amor que soy sin dependencias...

Recuerdo cuando era más joven (voy a cumplir 50 años y estoy ilusionadísima!)... lo que me agobiaba no salir un viernes, se me despertaba la bicha esa interior que me gritaba, que me ponía en marcha hacia cualquier plan, aún sin apetecerme, el tema era salir, distraerme, estar acompañada. Hoy siento una paz inmensa cuando mis niños se van y me hago capullo para poder sentir una vez más, a la mariposa que hay en mi interior. Estar con uno mismo es un placer y que el ego se calle porque de ésto no entiende...

Almu Fuentes

jueves, 31 de octubre de 2013

Cornillos en un día de Halloween


Hoy celebramos Halloween o Jalowei como decía la madre de una amiga... qué más da! El caso es que hoy tenemos la oportunidad de vestir nuestra casa con algo diferente y eso a mi, me llena de ganas, me llena de magia. Me fascinan los colores naranja y negro, los símbolos de esta fiesta exportada pero que anima a cambiar, a reír, a disfrutar... Vencer las resistencias y no oponerme a celebrar algo que no es "nuestro", atravesar las creencias y envolvernos con el colorido del otoño en forma de calabazas, murciélagos y ratones.
Me asombra la creatividad del ser humano que sale desde su profunda libertad, desde la esencia, desde las alas extendidas que se atreven a crear, a imaginar, a soñar...
Desdramatizar el miedo, las sombras, las fobias, reírnos y bailar en torno al "truco o trato". Comprar caramelos y esperar a que algún niño llame a la puerta vestido con una capa o un tridente, tal vez con unos CORNILLOS (palabra genial inventada por mi maravillosa hija), ver la sonrisa, la emoción, la expectación en esa mirada que se asoma a este día curioso, mágico, diferente.
Feliz día de Halloween, de hojas de colores de infinitas tonalidades, feliz día de risas y pelucas, de talco en el pelo, de cicatrices sanadas, de bolsas de dolor calmadas... feliz día naranja y negro y gris y verde y granate...

Almu Fuentes

miércoles, 30 de octubre de 2013

Ser amable me aporta felicidad



Cuando presto atención en la carrera del día a día, me doy cuenta de lo importante que es ser suave y amable. La suavidad supera a la dureza, el agua se filtra por las rocas sin que éstas puedan hacer nada para detenerla. Como madre de cuatro hijos, me pierdo muy a menudo en el miedo, en las expectativas, en mis proyecciones... solamente parando unos momentos, conectando con mi respiración, aquietando mi mente, me llega el rayo con la respuesta. Una respuesta que me habla de amabilidad, de suavidad, de ternura, de cariño, en definitiva de Amor.

Me llegaron hace unos días las primeras notas de mi hija pequeña, un 4,9 en matemáticas con resultado de Insuficiente... su cara lo decía todo, se sentía mal, había suspendido. Acogí ese papel entre las manos y lo miré, mi primera reacción fué Culpar. A quién podía echarle la culpa de ese resultado? a mi hija que tal vez no había sabido resolver los problemas con soltura? al colegio por su supuesta crueldad con una niña de 8 años? al sistema por no ser compasivo y regalar una décima para convertir el suspenso en aprobado? o finalmente a MI?... a mí era lo mejor. A mi porque en definitiva soy yo y solo yo la responsable de haber escogido un colegio, de llevar cada mañana a mi hija a ese centro, de meterla en un sistema de locos, a mi... a mi... a mi... a mi, que tal vez no le dedico el tiempo suficiente? a mi que no me siento con ella como hacen otros padres para repasar una y otra vez... y la culpa me invadió como una ola gigante y me vi llena de miedo y de tristeza.

Qué puedo hacer por mi? qué puedo hacer por mi hija? qué puedo hacer por el sistema? AMABILIDAD.

Pasar el filtro de la amabilidad, de la suavidad, tratarme con amor y respeto, con cariño y comprensión. Eso significa renunciar a culpar, a buscar responsables. Permitirme que salga mi enfado sereno sabio e integrado es ser amable conmigo. Permitirme llorar o sentir miedo es ser amable conmigo. Permitir que mi hija no se agobie o se angustie es ser amable con ella. La vida es un juego, no me cansaré de repetírmelo, de recordármelo. Ser amable, suave, cariñosa con lo que siento yo es poder proyectar esa misma amabilidad, suavidad y cariño en los demás. Me rindo a la búsqueda de culpables, me rindo a juzgarme o a juzgar y me entrego por completo, desde mi esencia a la suavidad del Amor que me rodea, comprometiéndome a filtrar cada cosa que ocurra por el filtro de la amabilidad.

Almu Fuentes

jueves, 10 de octubre de 2013

A una niña



Me siento a escribir en ésta mañana tan bonita en madrid y traigo ésta imagen porque la llevo dentro, en el fondo del corazón. Desde mi parte humana, me pregunto por qué? para qué?...
Hoy quiero hablar de la niña oriental, venida de tan lejos a unos padres que han decidido supuestamente cortar para siempre el hilo rojo que les unía.

Entonces me conecto desde mi esencia con tantos y tantos padres adoptivos que aman y cuidan a sus hijos lejanos, a sus hijos del corazón. Se que la muerte de cualquier ser humano es para nosotros incomprensible, no hace falta ser padre ni madre para sentir un dolor profundo en el corazón cuando se lastima a un niño, tampoco es necesario que sea adoptivo o biológico porque para mi es lo mismo... pero qué digo lo mismo, si soy sincera, yo me siento aún más responsable de un ser que llegó al mundo y sufrió el abandono cuando su piel aún olía a bebe. Y siento el dolor de unos padres que no pudieron tenerla y eligieron ponerla en el camino de la adopción, en la confianza de un futuro mejor.

Los padres adoptivos formamos un sistema, el de haber elegido amar incondicionalmente a un pequeño ser que no nació de nuestras entrañas, nos sentimos inmensamente afortunados. Nos cruzamos en la vida con un propósito similar, nos sonreímos en la distancia de las frías salas de las distintas comunidades. Compartimos como familias la alegría y los nervios, nos conectamos si así lo deseamos más allá de las fronteras y del idioma.

Me cuesta comprender cómo unos padres del corazón, que pasaron por los mismos trámites que hemos pasado todos los que tenemos la suerte de haber elegido adoptar un hijo, puedan tener una pérdida de corazón tan grande como todo indica que puede haber pasado. No imagino en todas esas almas amorosas que han vivido reuniones y exámenes, controles de sus casas, de su vida, de sus familias... que han sentido el nacimiento de sus hijos a través de unas fotografías , el vacío y la impotencia que a veces sentimos por el tiempo transcurrido, no nos imagino haciéndoles daño.

Y desde mi parte espiritual, acepto que aquella niña de 12 años tenía ese destino... aunque tenga que respirar muchas veces para soltar el dolor y la rabia. Desde mi parte espiritual, siento que los padres que hacen daño a su hijo, que deciden su destino con tanta dureza y crueldad, no son más que pobres seres humanos desconectados de sí mismos, llenos de miedos y de limitaciones y con unas perspectivas muy limitadas. Que lo que han hecho es consecuencia de su propio dolor y de sus sentimientos de limitación y separación y están presos de una tremenda infelicidad. Si todos estamos conectados, si somos todos uno, puedo percibir que en realidad ellos representan la parte enferma de una sociedad que somos todos.

Querida niña que cumpliste tu destino, sé que hoy estás con todos los padres y madres que nos han precedido, que ya no sientes miedo ni dolor, que estás viva en otra dimensión, que acabaron tus sufrimientos. Me gusta imaginarte con una flor en la mano y una sonrisa en el rostro, me gusta sentir que nos miras y nos das fuerza y alegría para seguir viviendo y disfrutando de tantos y tantos niños como tú.


Y con ésta imagen me quedo. Que sigas feliz allá donde estés.

Almu Fuentes







viernes, 4 de octubre de 2013

Cuando acepto... me abro a lo nuevo



Me encanta el otoño... una vez que se me pasa la morriña del verano, que comienzo a guardar la ropa más fresca, que acepto volver a ponerme calcetines, que el moreno que me da luz va desapareciendo... cuando acepto, entonces me abro al otoño y sin resistencia alguna, soy capaz de mirar asombrada el color de las hojas de los árboles, las aceras llenas de hojas que crujen en un sonido conocido. Me encanta el otoño, me encanta su gama de colores, la lluvia y la belleza del paisaje.

Cuando acepto, me abro a lo nuevo y vuelvo al vivero a por flores, naranjas, marrones y moradas. Cuánta felicidad me aportan! Me pongo una chaqueta y un pañuelo al cuello y sin resistencia me mimetizo con el paisaje y a seguir viviendo, confiando en que no tengo que hacer nada más que disfrutar, aceptar sin esfuerzo. Y si el otoño me trae algún momento melancólico, entonces también lo acepto, no huyo, me meto sin miedo y respiro sabiendo que también es bueno para mi.

La madre tierra nos trae paisajes diferentes para sorprendernos, para que no nos aburramos, para que cambiemos el calzado, la ropa, la mente y el corazón y agradecerlo es estar conectada con ella. Salir cada día a conquistar el silencio interior, dormir en paz dejando aquello que nos ha preocupado atrás, confiar en la sabiduría que nos guía, nos llena de luz.

He cambiado el mojito por un té, pero lo mejor, es que me adapto, acepto, confío y eso hoy me llena de calma para seguir caminando.

Feliz otoño, dar paseos, comprar flores, recoger hojas y mirar con ojos nuevos lo que acontece es mi mejor equipaje.

Almu Fuentes

lunes, 23 de septiembre de 2013

Confiar en mi Yo infinito


Empieza el otoño y aquí seguimos, transitando la vida como buscadores. Despertamos una mañana con la certeza de que el paisaje que nos rodea se irá transformando convirtiendo la naturaleza en un cuadro nuevo en el que estamos todos representados.
Este verano que acaba de terminar me ha traído muchos aprendizajes, pero hoy quiero destacar un libro. Agradecer a Alfonso, amigo y compañero, maestro de maestros, gran terapeuta transpersonal esa sugerencia amorosa que me hizo antes de comenzar las vacaciones: Almu, un libro, te recomiendo un libro: Morir para ser yo de Anita Moorjani, es sencillo, fácil y lleno de consciencia.

He disfrutado mucho leyéndolo, ahora mismo me acompaña en mi mesilla de noche, le he sacudido la arena y la sal de entre sus páginas y quiero transcribir hoy en mi blog una parte que hace que mi alma se emocione cada vez que la leo:

"Ahora he aprendido a confiar en la sabiduría de mi yo infinito. Sé que yo, al igual que todo el mundo, soy una fuerza poderosa, magnificente, amorosa y amada incondicionalmente. Esta energía fluye a través de mí, me envuelve y es indistinguible de mí misma. Es, de hecho, quien soy y lo que soy en verdad. Confiar en ella es sencillamente, confiar en mí misma. Permitir que me guíe, me proteja y me dé todo cuanto preciso para mi felicidad y bienestar definitivos es consecuencia del mero hecho de permitirme ser yo misma.
Solo necesito ser el amor magnificente que soy y permitir que los acontecimientos y las circunstancias de mi vida ocurran como hayan de ocurrir, porque sé que lo que sea que suceda es siempre para mi mejor interés a largo plazo.
Me desapego de cualquier resultado preconcebido y confío en que todo está bien y es para bien. El hecho de ser yo misma permite que la totalidad de mi magnificencia única me impulse en las direcciones que son más beneficiosas para mi y para los demás. Esto es realmente lo único que tengo que hacer. Y dentro de ese marco, todo lo que es verdaderamente mío llega a mi vida sin esfuerzo, por las vías más mágicas e inesperadas que podamos imaginar, demostrándome todos los días el poder y el amor de aquella que verdaderamente soy"

Y con éste texto que nos habla de confianza en nosotros mismos, saludo hoy al otoño y a todos os deseo una feliz semana.

Almu Fuentes

lunes, 16 de septiembre de 2013

Big Mind con Alejandro Villar


Este hombre sencillo, afable, cercano ha sido éste fin de semana maestro de maestros. Imposible no buscar estar lo más cerca posible de él como si así pudiera integrar cada palabra que decía. Un biólogo buscador, cuya parte escéptica le llevó hasta un gran maestro Zen , Genpo Roshi creador de la técnica Big Mind escrita en su libro (agotado por cierto) Gran Mente, Gran Corazón.

Genpo Roshi dice que somos seres (almas) humanas (mi pequeño yo), que buscan encontrarse. Esa definición me llega y algo en mi interior se alegra. Yo soy todas mis voces, infinitas voces, tantas, que algunas ni tan siquiera las reconozco desde mi pequeño yo. Ocurre que algunas voces no me gustan, no quiero tenerlas, bien porque sentí que me hacían daño o hacían daño a seres que amaba, bien porque nunca supe comprenderlas. Todas esas voces las metí en mi sótano, en mi sombra... en algún momento a lo largo de mis 49 años, he ido disociando voces (contigo no bicho!!!) y creyendo que no las tengo, las fuí abandonando.

Las voces disociadas golpean y salen a hurtadillas... que boba, yo me creía que mi sótano era seguro, pero estamos tan bien hechos que todo lo necesario sale. Podría una orquesta sonar sin alguno de sus instrumentos? Las voces pueden sonar como una orquesta en la que cada músico toca su instrumento en el momento adecuado para crear un sonido acompasado.

Hablar con cada voz ha sido un ejercicio sorprendente, las lágrimas y las carcajadas se mezclaban en una sala cálida de KayZen, sede de la Escuela Transpersonal en El Escorial. Alejandro Villar, como un gran director de orquesta facilitaba con amor y humor, el camino de las voces.

Saber que soy todo, integrar a mis voces, comprender que si las acepto tienen muchas cosas buenas que ofrecerme, ha sido el mejor regalo que he podido hacerme éste fin de semana. El mejor ejemplo para mi fué el caballero, ese ser amoroso y galante que en el campo de batalla corta cabezas y mata... mi pequeño yo con sus resistencias, con sus miedos, ha sido abrazado por mi gran mente, la que nada desea, la que nada piensa... y yo... o mejor dicho dicho, mi pequeño yo... no sabía que estaba.

Voy a escuchar a cada voz con atención plena, voy a sacarla del sótano sabiendo que es un trabajo de por vida, voy a preguntarle a cada voz, qué puede aportarme que me acompañe para ser más feliz y vivir más en mi... gracias Alejandro.

Almu Fuentes... más integrada







jueves, 12 de septiembre de 2013

Saber quién no soy... para saber quién soy


El buscador es el que está en busca de sí-mismo.

Abandona todas las preguntas, excepto una: Quién soy?
Después de todo, de lo único que estoy segura es de que "yo soy", así de simple, así de sencillo.
Pero me empeño a veces en pensar Yo soy ésto... y entonces me engaño.

Para saber lo que yo soy, primero tengo que saber lo "que no soy". Qué lío para mi mente que intenta comprender a medida que escribo.

Dice el maestro Sri Nisargadatta Maharaj, que tengo que descubrir que no soy mi cuerpo, ni mis sentimientos, que no soy mis apegos, mis preocupaciones ni mis pensamientos. Que no soy el tiempo, ni mi edad, ni un espacio, ni tantas cosas más.

Nada que yo perciba puedo ser yo, porque percibo a través de la mente y lo que la mente crea es irreal. Yo no soy lo que percibo.

Mi mente me describe a mi misma y a los demás en términos negativos o positivos, lo positivo y negativo es otro invento de mi mente, son percepciones, no son reales.

En mi silencio está el fin de mi búsqueda, yo soy un ser sin límites.

Gracias Maestro, gracias amigo.


Almu Fuentes

martes, 10 de septiembre de 2013

Volver a casa


Qué tiene la playa que nos envuelve en una sensación de libertad? Para mi es consciencia a tope.
Creo que no me he puesto en 5 semanas más que unas simples babuchas de hace varios años, gastadas, de cuero y con las que prácticamente ando en contacto con la tierra. No he necesitado más.
La plancha ha pasado a ser un elemento innecesario y olvidado, los bañadores y las toallas han reemplazado a camisetas y camisas... las sábanas suaves, ligeras, el aire entrando limpio por las ventanas y un libro, mi gran compañero.
Lo primitivo del mar me conecta con mi esencia, el vuelo de las gaviotas recuerda a mi inconsciente que el don de volar no es únicamente de los pájaros. El sonido de las olas me mete en una dimensión en la que comprendo la ligereza de mi cuerpo.
Cada vez que me marcho de la playa, de esa arena blanca y las señales de madera, me pregunto... A DONDE VOY? mi ego me dice, vuelves a casa y entonces me pregunto QUE ES VOLVER A CASA?

Siempre estoy en casa, estoy en mi. Este año pongo mi intención en saberme en casa, esté donde esté. Permitirme ser yo misma, no desviarme tratando de ser quien no soy, no tratar de ser nadie diferente al propósito superior de mi elección consensuada. No tengo nada que hacer para quererme, nadie tiene que hacer nada para que le quieran, el amor incondicional es el de uno mismo, el de permitirse SER.
Y desde la felicidad de estar en casa... escribo, siento y soy.

almu fuentes


martes, 18 de junio de 2013

Besar a mi "parte oveja"


En muchas ocasiones, me siento como una oveja en un rebaño y es en esos momentos, en los que también pongo consciencia, en los que me saltan mis resistencias. El tráfico para ir y venir a los mismos lugares, las colas que habitualmente tenemos que hacer... la parada estorbando a los demás conductores en la puerta del colegio de los niños y tantas otras situaciones cotidianas. ¿Os pasa?

Hoy he pensado que quiero abrazar mi parte oveja, si, abrazar la oveja que hay en mi porque he sido yo y soy yo la que cada día elijo serlo. Vivir en una gran ciudad y meterme dentro de un sistema es única y exclusivamente mi propia elección, aunque a veces no me guste, soy también yo.

Y también he sentido, que puedo poner consciencia en el rebaño, ser amable y sonreir, trabajar mi paciencia y mi aceptación y por qué no, cultivar mi agradecimiento. Mirar a las demás ovejas con ternura y complicidad, intuir que esas ovejas son mucho más que simples personas que van y vienen al igual que yo. Observar la forma en la que caminan, imaginar sus vidas y sus historias y convertir el paseo en un baile de afecto y sincronía.

Besar a mi parte oveja y ser amable con ella, hoy me ha hecho sentirme más feliz.

almufuentes@gmail.com


miércoles, 12 de junio de 2013

Esperar es confiar


Cuando tenemos miedo, estamos admitiendo que "algo" tiene el poder de hacernos daño.
Admitir, es creer en un pensamiento. Creer en un pensamiento es entenderlo a nuestra manera.
El entendimiento evalúa erróneamente porque no es lúcido y por lo tanto destruye inevitablemente nuestra paz.

¿Qué pasa si pensamos que no hay error que pueda alterar nuestra paz, que todos los errores podemos llevarlos a la luz?. Corregimos los tropiezos yendo hacia delante... todo está bien, todo es avanzar, todo es el camino.

¿Qué pasa si depositamos aquello que nos resulta complicado en un espacio imaginario en el que "alguien se hace cargo", una especie de buzón espiritual que no vemos, que no tocamos, pero que existe?. Dejamos de creer que tenemos que controlar cada pequeño detalle, del pasado, del presente y del futuro y delegamos en una fuerza superior... ¿eres capaz?

Mi miedo no puedo controlarlo, pero si permitir que sea auto-controlado. Recuerdo muchas veces las palabras de una de las personas más lúcidas que he conocido: Almu todo aquello con lo que no puedas, déjalo fluir y espera. Esperar es confiar, es liberarse del intento de gestionar. Admitir con humildad que hay cosas, momentos, situaciones que no comprende tu pensamiento, tu mente, pero si tu esencia.

Cualquier camino en el que estemos, nos lleva allá donde vamos. Confiar con la mirada limpia y clara de la niña de la foto es una elección, una sabia elección.

almufuentes@gmail.com

martes, 11 de junio de 2013

El balón que escondo...


El balón que escondo es aquello que no quiero que tu veas de mi. El que escondes tú, es aquello que quieres ocultarme. Todos tenemos balones bajo nuestros pies, balones así de grandes que mantenemos en el fondo con la gran agilidad que nos caracteriza.

Pero, cuánto cansa mantener la atención para que ninguno se nos escape y salte a la superficie con tanta fuerza, que no podemos hacer nada para ocultarlo... son esos momentos en los que reacciono de forma extraña para los demás, en los que me pongo como un basilisco por una teórica tontería, en los que se desdobla mi personalidad y aparecen mis demonios. ¿Os suena?

Cada vez que no te reconozcas, para un momento, intenta ver cual es el balón que no has podido retener en el fondo, abraza a ese balón y no vuelvas a hundirlo. Sé práctico, si lo hundes, volverá a saltar antes o después. Tal vez si lo dejas fuera podrás quitarle el tapón de seguridad, ese que nos impide que salga el aire,  y quién sabe si con el tiempo, ese balón se ha convertido en un pequeño globo que puedes guardarte en un bolsillo.

Visualiza tus balones, el cansancio de tus pies, pon atención y presencia y cuando salten con mucha fuerza, extiende tus brazos hacia el aire, coge el balón al vuelo, no se lo pases a nadie. Es tu balón, es tu nuez, es tu sombra y en definitiva forma parte de tu maravilloso ser.

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lunes, 10 de junio de 2013

Pedir ayuda y dejarse ayudar


Pedir ayuda y dejarse ayudar nos cuesta... ¿verdad? pero muchas veces, somos un saco mudo de expectativas, que se van convirtiendo en decepciones según nos lo vamos contando.

Esa creencia de que "nosotros solos podemos" nos ha empujado a llegar al lugar en el que estamos y como siempre digo, está bien. Sin embargo cuánta ayuda hubiéramos podido pedir para que el camino resultara más fácil de transitar.

Pedir, ¡qué gran palabra! y como todo lo sencillo, qué complicada de pronunciar.

Estaba hoy pensando que todo aquello que resulta fácil en la infancia, como por ejemplo pedir, lo vamos limitando. Yo me sonrío pensando la cantidad de veces que a mis hijos les digo "¡¡pareces un cura!!", pero también pensaba las veces que les he dicho "tú puedes solo". Qué complicados somos, que sencillo es todo y cuando ya se nos mete en la cabeza el "yo puedo solo", entonces alguien te dice:
¿por qué te cuesta tanto pedir ayuda? y vuelve la confusión.

Vamos a hacer el ejercicio de PEDIR, pide todo aquello que quieras, eso que necesites, que te acompañen al médico, que no pasa nada, que no eres más débil, que te ayuden con la compra, que te escuchen, que te abracen, que te dejen tranquila. Pide lo que tu desees como si fueras la creadora de todo lo que te rodea, y digo yo, ¿como si fueras? NOOOOO es que lo eres.

¡No lo dejes para mañana, hoy PIDE y DEJATE AYUDAR!

Y entrar en la energía de estas palabras me ha dado hoy, un poco más de felicidad.

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jueves, 6 de junio de 2013

Familia numerosa


Qué divertido es llegar a casa y encontrarlos, cada uno con su historia, siguiendo su propio camino, buscadores incansables de aquello que desconocen... ser madre fue para mi una de las grandes decisiones de mi vida.

Y como todo lo que yo deseo, tardaron un poco en llegar, pero cuando llegaron, ¡lo hicieron a lo grande!
Ellos son un premio y unas gafas para ver la vida. A veces miro a través de mis propias lentes, otras a través de la de cada uno de ellos y es increíble, lo que veo es tan diferente...

Confieso que tengo momentos en los que una parte de mi se siente culpable, darles más tiempo y más horas de calidad me encantaría, pero yo soy una entusiasta de mis cosas, de mis amigas, de mis espacios y sé que ellos son felices si me sienten a mi feliz.

Dice el gran neurólogo Antonio Barrio Nicolás, que los padres hacemos muchas cosas equivocadas y es cierto. Una vez hasta se atrevió a darme un tanto por ciento muy elevado, pero sonriéndome me dijo: Almu lo importante es hacer muy bien aquello que hacemos bien y eso me gustó mucho.

La vida con una familia numerosa es activa y cargada de "momentos". A veces, también es cansada, es justo reconocerlo, pero yo doy gracias cada día por la oportunidad de tener a mis cuatro hijos, tan diferentes, tan únicos. Ellos me dan fuerza e inspiración, me hacen reciclarme, no quedarme en viejas ideas, repasar mis creencias, me dan amor y humor y ser consciente de ésto hoy, me ha hecho un poco más feliz.

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miércoles, 5 de junio de 2013

Poder acariciarla sin estornudar...


Merece la pena mirar a los ojos de ésta gata, son tan bonitos los gatos... y a mi me dan tanta alergia que no puedo ni tocarlos.

Leía hoy en el Tratado de Descodificación de Enric Corbera y Rafael Marañón, que la alergia al gato es un conflicto de Independencia, es un "no puedo salir de casa"...

Será verdad? podría ser posible que yo haya generado una alergia a un animal que me parece bellísimo, que da buena energía, que es limpio, por un trauma en algún lugar de mi inconsciente?

Y me miro en los ojos de ésta gata... y recuerdo todos mis intentos por lograr mi independencia... mis idas y venidas, mis luces y mis sombras... y respiro y me encanta.

Me gusta mucho pensar, imaginar, sentir, que algún día no muy lejano "esos flecos inconscientes de mi conflicto de independencia" me llevará a sentarme al lado de un precioso gato, acariciarle el lomo y sentir su suave ronroneo...

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lunes, 3 de junio de 2013

Nada ocurre sin haberlo previamente imaginado


El que no perdona, en realidad no se perdona a sí mismo. Conviene entonces mirar con valentía hacia el interior para ver qué es aquello que no te perdonas. Sería imposible hacerlo sin poner unos rayos de consciencia, una pizca de silencio y unas gotas de amor.

Recuerdo que hace unos años, tenía a un vecino de éstos gruñones que hay en muchas casas, exigentes y críticos. Cada vez que me lo encontraba, algo en mi se encogía. Rechazarlo era la mejor opción, echarle toda la culpa a él, juzgarle como un hombre amargado e infeliz era lo más fácil. Con el tiempo he comprendido que aquel ser, me señalaba partes mías... ¡qué faena, ésto era lo más duro de todo...!

Verle cada mañana me recordaba esas sombras que yo trataba de esconder.

El perdón es un acto de amor a uno mismo. Cuando perdono me perdono y cuando me perdono me libero de la culpa. Vivir con culpas es andar con peso, llevar bolas enormes a nuestras espaldas que nos debilitan, que nos cansan, que nos entristecen.

Imagina que eres capaz de perdonar, de abrazar a ese ser que te hirió... y recuerda

Nada ocurre, sin haberlo previamente imaginado.

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domingo, 2 de junio de 2013

Queridos extraterrestres...




Microsoft y en concreto Paul Allen, ha donado 26 millones de dólares a la construcción de un nuevo sistema de telescopios, para intervenir conversaciones entre civilizaciones extraterrestres...

Y yo resoplo en mi mesa de trabajo mientras lo leo y le doy un sorbo a mi taza de té. Busco rápidamente entre mis imágenes y escojo ésta. La foto me resulta tan tierna, que mientras la pongo me dan ganas de gritar ¡extraterrestres cuidado, que los que se creen ricos y poderosos van en vuestra caza.!

Me gustaría avisaros para que no os dejéis coger, pues si os cogen, os meterán en laboratorios o en museos, os maltratarán de todas las formas imaginables y aprovecharán vuestra información para seguir cultivando el materialismo y generando infelicidad, solo para enriquecerse más...

Aunque si soy sincera, yo estoy convencida de que los extraterrestres, (que debe haberlos, porque no vamos a ser nosotros los únicos en las galaxias), nos miran con extrema compasión, con cariño y hasta con pena, como si fuéramos pececillos dentro de una pecera abriendo y cerrando la boca y la verdad, yo se lo agradezco y respiro aliviada.

No es que me parezca mal que se gaste la energía del dinero en molestar o espiar a seres de otras galaxias, es maravilloso que el hombre quiera saber más y más (lo malo es que no es solo para saber, sino para abusar y enriquecerse), pero además, en éstos momentos en los que vivimos, cuando los seres humanos estamos comprendiendo que el verdadero viaje es a uno mismo, que el viaje más sabio y emocionante es al otro, al que tenemos al lado, porque solamente en él nos vemos como si fuera un espejo... lo que me gustaría sería, que éste buen señor donara 26 millones de dólares para  crear espacios de meditación, de silencio, para crear campos de cultivo de alimentos sin pesticidas, para limpiar los mares, para proteger a los animales, para cuidar los árboles, para hacer caso a los niños con déficit de atención e hiperactividad, que vienen a avisarnos de que las cosas tienen que cambiar, para crear nuevos modelos de educación, para que no se abandonen niños ni tampoco animales, espacios para que nuestros mayores vivan rodeados de amor y compañía y tantas cosas más...

 Y si quiere investigar, que investigue, pero en el interior de los seres humanos...

Señor Allen, deje en paz a los extraterrestres, que aquí, en la tierra, en nuestra pecera, tenemos un montón de cosas pendientes.

o no?

almufuentes@gmail.com


miércoles, 29 de mayo de 2013

Decir adios...


La gran pregunta que me hago cada día es... ¿qué puedo aprender de lo que hoy he vivido?
Y hoy he aprendido que el adiós a un ser querido que ha vivido su vida de la forma que ha elegido, lo mejor que ha sabido, no es un drama. No podría no escribir sobre ésto ésta noche lluviosa de Madrid después del ejemplo de familia y amor que he visto.

Cómo me gustaría partir así, rodeada de mimos, de cariño, de sentido del humor y del amor. No me extraña que cuando un ser es tan amado y tan cuidado no quiera irse.

El abrazo de los seres queridos en torno a una partida es un abrazo de esperanza. Yo siento que volveremos a encontrarnos todos en algún lugar misterioso, que nos veremos con aquellos que nos dañaron y nos fundiremos en un gran abrazo haciéndonos un guiño ante lo vivido.

Yo creo que los guías que nos acompañan han recogido hoy a ese anciano amoroso, que miraba embelesado a su viuda y a sus hijos desde otra dimensión. Claro que estaba ahí, pero fuera de ahí, y desde hoy esperando a los que antes o después, nos reuniremos con él.

Feliz vuelo, feliz viaje tío. A nosotros nos toca seguir jugando...

almufuentes@gmail.com

domingo, 26 de mayo de 2013

Mi maestro: un gusano de seda


Me encanta tener gusanos de seda en primavera, es un ritual conseguirlos y buscar la caja en donde meterles. Localizar el árbol de morera para coger hojas frescas e incluso buscar proveedores entre tus conocidos y amigos.

Reconozco que para mi son unos maestros de Atención plena y paso mucho rato observando sus movimientos, su forma de comer, como van engordando, el color de su piel, por no hablar de cuando comienzan a hacerse capullos y se pegan a las paredes hilando alrededor de ellos, ese fino hilo de seda.

Después, esperar a que se transformen y salgan del capullo convertidos en mariposas... Uauuuuu, una vida entera pasando delante de nuestros ojos, sin importarles quienes somos ni por qué les miramos. Centrados en su trabajo y en su misión, sin cuestionar, sin exigir, sin hacer ruido, sin molestar. Moviéndose sigilosamente sin atacarse, compartiendo en la tranquilidad, en la misión personal... sin comparaciones, sin envidias, sin contar cuánto tarda cada uno, cuántos huevos ponen o qué esquina eligen...

Me encantan los gusanos de seda que me hablan de transformación como dice una buena amiga, pero también de calma, de paz, de silencio, de serenidad, de lentitud, de contemplación y de vida.

Y para los que elegimos disfrutar de ellos cada primavera... he encontrado una idea maravillosa para no tirar los capullos vacíos. La vida y los seres humanos no dejan de sorprenderme... y eso, me hace muy feliz.



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viernes, 17 de mayo de 2013

Alimentarse de amor...


Un gran pecho de amor, eso es lo que todos necesitamos. Horas y horas mamando de los besos y abrazos que no hemos recibido, saboreando las caricias que se perdieron por las prisas, por la vergüenza, por las creencias.

Creencias que hicieron a los padres duros, que les alejaron del hogar, que les centraron en sus trabajos, las mismas que hicieron a tantas madres esclavas sin libertad, sin posibilidad de elegir. Tantas madres cansadas y heridas, tantos padres carentes de amor en si mismos, tantos abuelos perdidos, tantas historias vacías de besos y caricias.

Que la ciencia consiga crear grandes pechos humanos de los que mamar cada 3 horas, que nos llenen de paz y nos colmen la sed del amor que somos. Y en el silencio de la noche, reparar con la serenidad del momento cada dolor, cada ausencia, cada temor...

Piel con piel, calor con calor y amor infinito para llenar nuestra alma.

almufuentes@gmail.com


martes, 14 de mayo de 2013

Fingir no aporta felicidad


Hoy quiero hablar de algo que todos conocemos bien: Fingir.

¿quién no ha fingido alguna vez estar contento cuando no lo estaba?, ¿estar relajado cuando los nervios le atenazaban o estar seguro cuando sentía todo lo contrario?
¿fingir que no te importa? ¿que no te has hecho daño? ¿que no te preocupa?...

Mi admirado doctor Julio Herrero, dice que "fingir es un proceso en donde te quedas donde estabas dando vueltas sin progresar, es un camino sin salida que bloquea el crecimiento y nos hace infelices".

Repasando mis creencias sobre la palabra "fingir", me doy cuenta, de que para mi, fingir era algo bueno, si con ello hacía a alguien feliz. Hacer de verdad feliz a alguien, es una forma de egoísmo maravillosa, yo hago feliz porque me siento feliz haciendo feliz. Pero también me doy cuenta de que en muchas ocasiones, no he sabido diferenciar la felicidad egoísta que me engorda, con el dolor del fingir que me adelgaza.

El asunto está claro, si doy y me duele FRÍO FRÍO, si lo sigo haciendo, estoy fingiendo y mi camino como dice el doctor ha entrado en "un bucle sin salida". Ahora bien, si doy para sentirme bien y no hay dolor, entonces CALIENTE CALIENTE, estoy en el buen camino, un camino evolutivo que con toda seguridad, me va a aportar felicidad.

Fingir es elegir un camino aprendido que no lleva a ningún sitio. Es coger un atajo que lleva a un callejón sin salida.

El problema de fingir, es que nos engañamos a nosotros mismos, y eso es absurdo porque yo sé como pienso, sé cuando lo que estoy diciendo o haciendo no coincide con mi forma de sentir, soy consciente de que me estoy haciendo daño mostrando una indiferencia que no siento o un dolor que me perpetra.

No finjamos. Stop al fingir. No hay que ser de ninguna manera, ni llegar a ningún lugar el primero, no hay medallas que repartir, ni trofeos que conquistar. Solo está el camino, la senda del aprendizaje. Seamos honestos con nosotros mismos, si alguien no te cae bien, no finjas que si, pregúntate por el contrario, ¿que te está reflejando esa persona que tanto te molesta? y aprende de ti, aprende para ti, sé egoísta.

No dejes tu coche si no te apetece, no vayas a una cena si te entra dolor de estómago solo de pensarlo, no compartas tu tiempo con personas negativas que no te aportan felicidad, no finjas ser quien no eres. Por el contrario trabaja en preguntarte, ¿por qué me cuesta dejar mi coche? qué problema tengo con soltar lo material, qué tipo de apegos o de miedos me dominan a veces? ¿qué ocurre en esa cena que me produce tanto malestar? ¿qué no puedo digerir de alguna persona en concreto o del grupo de personas que estarán en esa cena?...

Y después de poner contra las cuerdas a la palabra fingir, silencio mi ruido interior y siento un susurro que dice... CALIENTE CALIENTE.



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lunes, 13 de mayo de 2013

Soltar y abrir con consciencia


Qué divertido es observar las creencias que nos limitan. Ese mapa que nos guía y que está hecho de caminos que ya conocemos, porque somos sabios o tal vez porque no es la primera vez que estamos aquí.
Mirar con alegría esos momentos, en los que nos damos cuenta de que podemos abrirnos a cosas nuevas. Tomar conciencia del irrepetible instante, en el que una espontánea sensación de libertad se abre paso desde el fondo de nuestro ser.

Decir adiós a lo viejo y saludar a lo nuevo. Dar la bienvenida en nuestra vida a nuevas formas de sentir y de pensar, a nuevos programas mentales sintiéndonos parte inevitable de un constante cambio.

Fluir hacia nuevos caminos que te presentan a nuevas almas, descubrir nuevos sonidos, olores y sensaciones, abrazar nuevas pieles o hacerlo con los ya conocidos, pero con nuevos ojos, con una nueva mirada.

Soltar y abrir, abrir para abrazar con más fuerza, soltar para dejar ir aquellas cáscaras que ya no necesitamos. Jugar, vivir, sentir, como niños, como almas... y abrazar los imprevistos. Darnos cuenta de como conspira el Universo y la conciencia Universal a través de la vida para que la oruga se convierta en mariposa.


almufuentes@gmail.com


miércoles, 8 de mayo de 2013

Mi sueño de ser especial...


Llevo años ya leyendo y adentrándome en conceptos de física cuántica y metafísica que me parecen alucinantes. Experimento una oleada de placer cada vez que, a través de la lectura o de la difusión de vídeos, me encuentro con seres muy despiertos y teorías maravillosas que POR FIN empiezo a comprender, no desde la razón, sino desde lo más profundo de mi esencia.

Y poco a poco, todo va cuadrando.

Hace unos días, en la tranquilidad del puente, leía en mi casa una frase que me impactó:

 "Tu tienes la creencia de ser un ser especial... pero aún no la has reconocido."

Como suele pasar, al principio, me resistí a la idea de creerme un ser especial, yo no, yo no me lo creo, ¡ni mucho menos! pero a medida que pasaban las horas y tras algunos espacios de silencio, me dí cuenta que SI. Yo me creo un ser especial sin ninguna duda. Y creo que mi madre es un ser especial y mi padre también. Creo que mis amigas son seres especiales y mis hijos los más especiales del mundo.

Una vez quitadas las caretas del ego, ya todo a mi alrededor era especial, incluido mi sorbete de limón... jajaja... será posible?

Pero entonces, me dí cuenta de que si soy especial, entonces no soy como mi amiga, yo soy más especial, y soy más especial que mi vecina y entonces, soy más y más y más y más... y para que yo sea más, ellas tienen que ser un poco menos y menos y menos...

Y ahí me comparo, y comparo a mis hijos, y comparo a mis amigas, QUE HORROR.

El problema está claro, creerse especial siempre conlleva hacer comparaciones y no solamente se trata de creerme especial, sino de intentar que mi pareja lo sea, que mis hijos lo sean, que mis padres lo sean, que los de mi alrededor lo sean... exigiéndoles algo en contra de su voluntad.

Como tu eres especial, lleva mis dolores. Como tu eres especial aguanta mis enfados, como tu eres especial pórtate como un santo, como tu eres especial haz lo que yo necesito, como tu eres especial adopta mi forma de pensar, entiende mi forma de sentir... y ésto, a mi ya no me vale.

Tampoco podemos exigir a los demás que reconozcan y se postren ante nuestras pequeñas cosas especiales.

Pero entonces, pensé, tengo que poner sobre la mesa unas cuántas creencias:

1. ser especial es muy bueno, significa ser único, el mejor
2. todos somos especiales... bueno unos más y otros menos...
3. aquellos que me complacen son especiales
4. yo quiero a alguien especial en mi vida, no a alguien cualquiera

podría describir muchas más creencias personales sobre ser especial, pero que cada uno que observe las suyas.

Recordemos que una creencia que no se ha reconocido, no es llevaba a la razón para ver si es sensata o no lo es.

Y yo, éstos días he puesto sobre la mesa "mi sueño de ser especial", lo he cortado en tiras, le he dado la vuelta como a un calcetín y he cambiado esa creencia por otra nueva:

Soy igual que tu, soy igual que cualquier persona que habita éste planeta, porque ella está en mi y yo estoy en ella y juntas formamos el todo. Soy igual y nada especial. Tu eres igual y nada especial.

Quiero verte igual porque así no me comparo contigo, no te tengo envidia y no te perjudico. Quiero verte igual para darme cuenta de que lo que veo en ti, lo tengo yo. Quiero verte igual para ser coherente con mi nueva forma de ver la vida. Quiero verte igual y que tu me veas igual.

Dice un curso de milagros: He aquí a tu hermano ofreciéndote la llave que tiene en su mano, no permitas que el sueño de ser especial continúe interponiéndose entre vosotros.

Casi nada...

almufuentes@gmail.com

jueves, 25 de abril de 2013

¿Reconoces nuestra unión?


Hoy voy a hablar del miedo. ¡Cuánto miedo tenemos o hemos tenído la mayoría de nosotros!

Yo tenía miedo, un miedo existencial que a veces ni siquiera sabía explicar.

Ese miedo del que hablo era básicamente un miedo sutil a la soledad.

Y claro la respuesta era sencilla: solo puedo sentirme sola si estoy separada.

Y ese era mi vacío, sentirme separada. Separada de los que estáis cerca y también de los que nunca he visto. Dicen que ésta angustia de separación es primitiva y viene del momento del parto, en el que nos separamos de nuestra madre, no digo que no tenga mucho que ver, pero siento que la separación va mucho más allá del mágico momento del parto.

Durante mucho tiempo, he buscado la forma, especialmente siendo terapeuta, de no tener miedo a la soledad y he leído mucho sobre la teórica respuesta: amarse a uno mismo o hacerse cargo de uno mismo, especialmente de la niña interior, esa a la que responsabilizamos casi todo el tiempo del sentimiento de soledad.

Las conversaciones que giraban en torno a la soledad, eran muy divertidas, a veces se supone que si yo me amo a mi misma, entonces no me importa quedarme un fin de semana en casa sin salir con mis amigas... no es necesario que me llamen mis padres o que me hablen mis compañeros de trabajo. Aceptar mi soledad es teóricamente que no me importe compartir o no mi tiempo, comer o no en compañía, ir solo al museo o incluso no tener ninguna necesidad... y ésto para mi no es del todo cierto.

Son nuestras creencias las que nos dicen que SOLO es igual a malo, pero también son las nuevas creencias que vamos sustituyendo por las viejas y que nos dicen APRENDE A ESTAR SOLO, así sin más, sin más explicación, como un acto heroico. Francamente para mi, es como decirle a alguien con claustrofobia , aprende a estar en un ascensor encerrado sin luz.  Si ésto fuera posible, sería genial, no lo dudo, pero yo particularmente siento que nos faltaban y aún nos faltan grandes explicaciones.

Dicen que los seres humanos, perdimos la información de nuestros ancestros en dos ocasiones, una de ellas fue precisamente en el incendio de la biblioteca de Alejandria en el siglo I. En aquella biblioteca, había conocimientos astronómicos, espirituales y médicos, entre otros muchos, de todos nuestros antepasados, egipcios, romanos, hebreos... desde entonces, el hombre se siente solo porque ignoramos, que formamos parte de una gran red, de un HOLOGRAMA UNIVERSAL y nos hemos dedicado muertos de miedo, a defendernos los unos de los otros, a pensar que no había para todos y atesorar, a robar, a quitar, a luchar, a enjuiciar y detrás de todo eso, está EL MIEDO.

No estamos solos. Nos lo han explicado mal, sin mala voluntad por parte de nadie. Nuestros ancestros directos vagaban sin mapas porque perdieron la información, esa que nos hubiera permitido saber, que somos más que un cuerpo, trabajar con la energía, y sentirnos parte del mundo que nos rodea.

Tal vez nos cueste mucho tiempo volver a entender todo aquello que nuestros ancestros nos dejaron escrito. Escribir para que otros te lean y partan de lo que tu ya sabes para avanzar. No estarán contentos nuestros antepasados allá donde estén, de aquel incendio, de aquella quema humana de sabiduría ancestral, pero tenemos la capacidad de recordar y ese es nuestro trabajo.

El miedo a la soledad que yo tenía, era el miedo a sentirme SEPARADA. Separada de ti porque he olvidado, porque mis ancestros directos olvidaron que somos una gran RED y yo imité sus conocimientos, los hice míos, y he vivido durante todos éstos años como un ser separado, asustado y vulnerable.

He tenido miedo a ser peor que tú, a tener menos que tú, un peor trabajo, una peor casa, a perder frente a tí, a que no me quieras, a que me juzgues, a que me ignores, a que no me comprendas, miedo a no estar contigo, a no conocerte, a tener que conquistarte, a tener que hacer algo para que me quieras. Miedo porque el ser humano se siente separado en muchos casos, hasta de las personas que más cerca están de ellas

No estamos separados, yo soy parte de tí, aunque no te conozca de nada y tu eres parte de mi aunque no nos hayamos visto jamás. Compartimos un mismo momento, estamos vivos a la misma vez, en la misma dimensión lo que tu hagas a mi me afecta y lo que haga yo, te afecta a ti. Y cuando me siento parte de ti, cuando me imagino abrazada y unida a ti, a cientos de miles de personas, a varios millones de seres humanos, entonces con solo imaginarlo, se me dibuja una sonrisa interior y siento una inmensa paz en el corazón.

Recordemos para los escépticos que durante muchos años el hombre pensó que la tierra era plana, no éramos bobos, es que habíamos perdido la información astrológica y astronómica y somos duros de convencer y demasiado newtonianos, creemos en lo que podemos tocar, en lo material, en lo físico. Yo pongo mi intención en entrar en un proceso de cambio, abrir mi mente y mi corazón a ésta nueva idea de UNIDAD y cada día voy a imaginarme así, unida, a tantos iguales como yo, sin hablar, solo respirando e imaginando tu mano en la mía, sin competir, sin envidias, sin juicios, tu cercanía, nuestra red. Voy a leerte y a celebrar lo que compartes con amor sintiendo que estamos unidos...



Qué juego tan divertido, qué feliz me siento hoy. Gracias

almufuentes@gmail.com

martes, 23 de abril de 2013

El espejo es para mi


Días sin escribir... con lo que me gusta entrar en éste espacio, lo siento, sobre todo por mi, por mi disfrute personal, pero he elegido libremente estar distraída con otros asuntos. Bueno, retomo y hoy quiero hablar sobre algo que me ha costado bastante trabajo comprender: el espejo.

Resulta que después de todo lo leído, estudiado por obligación y por devoción, me doy cuenta de que cada persona que me rodea, cada ser humano que tengo la suerte de encontrar en el camino, me señala partes de mi. Soy capaz de verme compasiva cuando reconozco la compasión en otro ser y así todo, desde la primera cualidad hasta el último defecto.

Ahora camino asombrada ante éste descubrimiento. Saber no es estudiar, saber es que aquello que observas o aprendes te entre por dentro y te invada con una sensación de inmensa comprensión.

De pronto, las cosas empiezan a ser diferentes y yo camino entre la gente aprendiendo, pero lo mejor, es que camino agradeciendo, porque cada persona está dentro de una nuez, trae un mensaje en su interior, en su exterior, en su actitud, en su energía, en su conducta, en su alma, en su esencia y ese mensaje ES PARA MI, es para cada uno de vosotros. Así de importantes somos.

Así que ahora resulta que aquel que me ha hecho daño es un maestro, y aquella que me pone enferma es una maestra... ahora resulta que era tan sencillo como no apartar ni alejar, como no enjuiciar o criticar, solo había que observar. Darme cuenta de que ese jefe exigente forma parte del juego, que viene a enseñarme algo y que ese vecino criticón, forma parte del juego y está para que tu y yo aprendamos algo, todo y todos forman y formamos parte del juego.

Ahora resulta que soy capaz de mirar con gratitud a cada persona que ha pasado por mi vida, también a las que permanecen y que me han enseñado y me enseñan cosas nuevas. Sería imposible que lo viera o lo aprendiera de otra manera, el que se inventó éste juego, ¡¡¡era muy sabio...!!!!

Ahora resulta que yo también soy maestra de otros a los que pongo enferma o he hecho daño... y que gracias a unos y a otros, nos vamos convirtiendo en las personas que somos, de piedras a diamantes, de capullos a mariposas, unos más y otros menos... jajajaja Feliz mañana.

almufuentes@gmail.com


viernes, 12 de abril de 2013

Y tu... ¿qué harías?


Esta mañana soleada en Madrid, te invito a hacerte a ti mismo, en silencio, éste pequeño test del mendigo, que te puede revelar información sobre el nivel evolutivo en el que estás. Si me lo permites y no te parece mal, solo pondremos una recomendación para éste juego, no juicio, no culpa, solo observación.

Respira y mira la foto... imagina que te has encontrado a éste mendigo en una esquina cualquiera, y en tu mano tienes una moneda que has sacado voluntariamente. Mírale a los ojos 10 segundos y ahora dime... qué harías?

1.- No se la das porque te dices a ti mismo "se la va a gastar en vino"...

2.- Se la das con condiciones "tome ésta moneda, pero por favor no se la gaste en vino"

3.- Se la das y piensas: "si alguna vez yo me viera así... me gustaría que me dieran una moneda"

4.- Se la das porque así te sientes bien o al menos evitas sentirte mal

5.- Se la das por la pura satisfacción de ayudarle sin preocuparte ni ocuparte de lo que hará con la moneda

6.- Te sientas con él o bien le invitas a algún lugar en el que os coméis un bocadillo y en vez de darle la moneda, le das tu atención y tu tiempo

Recuerda nuestra norma: no culpa, no juicio, solo observación...


El resultado de mi test es secreto como el tuyo, pero ahora me gustaría contarte, que cada actitud responde a un nivel evolutivo. Estos niveles son todos buenos y necesarios, forman parte de nosotros. Son formas de amarnos diferentes, porque en cada una de ellas estoy yo detrás o lo que es lo mismo, está el amor por mi mismo.

1.- En el primer caso no le doy la moneda y actúo de forma primaria, es el primer escalón evolutivo. Le doy permiso a la mente para imaginar lo que el mendigo va a hacer con la moneda y me la guardo en el bolsillo. No hay trueque, hay decisión unilateral.

2.- En el segundo caso si hay trueque, una forma de relación más refinada, le doy la moneda con una condición, que no se la gaste en vino. Le vendo la moneda amorosamente y espero que él haga con la moneda lo que yo quiero que él haga.

3.- En el tercer caso, se la doy pensando en mi, si alguna vez me pasa... a mi. Así parece que el Universo me debe una, que tengo un pequeño depósito de monedas en algún lugar. Un "seguro de mendigo" figurado. Este tercer nivel se correspondería con la "recompensa aplazada", no hay trueque inmediato, pero si una recompensa que si soy sincera, espero obtener.

4.- Se la doy para sentirme bien, porque sentirme bien me da placer. Empiezo a reconocer el placer que me da la bondad.

5.- Se la doy sin pensar, solo por el hecho de ser generosa que me reporta un inmenso placer. Empiezo a sentir el placer que da la generosidad, o el altruismo, sin esperar nada a cambio.

6.- Comparto con el mendigo mi abundancia, mi ser, mi tiempo, mi espacio, mi sonrisa, mi energía... me siento conectado y no separado.


Vuelvo a respirar y ésta vez miro en mi interior. Pongo mi intención y mi sonrisa en "darme cuenta" de todas aquellas situaciones que acontecen en mi día y día, que me sirven para despertar. DESPERTAR qué palabra más bonita. Feliz fin de semana!

almufuentes@gmail.com




jueves, 11 de abril de 2013

Es posible ser libre


Es posible ser libre cuando el vivir no está apegado a los sentidos, a las personas o a las cosas.
Es posible ser libre cuando respeto el devenir de la vida, los puntos de vista ajenos y la libertad de los demás.
Es posible ser libre si entiendo que soy un ser espiritual viviendo una experiencia terrenal, que no estoy indefensa ni separada, incluso de los que no están físicamente.
Es posible ser libre cuando me encamino a una vida sencilla, con comida sencilla, con cosas sencillas, con silencios, con paseos, sin contar tanto con las distracciones artificiales...
Es posible ser libre cuando no analizo los pensamientos porque ellos no son lúcidos, ellos enredan, me cuentan historias, argumentos... y está bien, no tenemos que eliminarlos, pero si desidentificarnos de ellos.

Es posible ser libre cuando miramos a los que nos rodean con amor, con respeto, con desapego... sabiendo que son tan libres como lo soy yo.

almufuentes@gmail.com

lunes, 8 de abril de 2013

El egoísmo es mi esencia más valiosa



Somos egoístas porque somos humanos. No es una opción, es una condición, o lo que es lo mismo, es debatible, pero no discutible.

En las últimas semanas, nos hemos divertido en los grupos de trabajo, poniendo sobre la mesa" lo egoístas que somos". Entre risas y protestas, hemos ido hablando de los distintos tipos de egoísmo que practicamos, antes incluso de asomar la cabeza en éste mundo. Quiero agradecer hoy a todos los participantes su sentido del humor y su trabajo, lo aportado y lo compartido, ha sido muy enriquecedor sacar finalmente del sótano de nuestras vergüenzas, una parte tan humana como necesaria para nuestra supervivencia.

Yo soy egoísta porque peleé como espermatozoide para ser la primera sin importarme un bledo lo que hacían los demás.
Yo soy egoísta porque me instalé en el cuerpo de mi madre y tomé de ella todo lo que necesité sin reparar en sus necesidades.
Yo soy egoísta primaria porque me convertí, como la mayoría de los bebes en el centro de atención de mis padres, robando su tiempo y sus horas de sueño, imponiendo mis necesidades y lo que yo quería por encima de todo: mi comida, mi baño, mi sueño, mis abrazos y mis carantoñas.

Además soy egoísta mercantil porque con mis iguales, con los que no era tan mimada como en mi casa, aprendí a "dar a cambio de"... no por generosidad, sino con el claro objetivo de conseguir aquello que yo deseaba. Practiqué mi egoísmo o trueque con mis hermanos "te doy mi pala y tu me dejas tu cubo"...
Aprendí el egoísmo aplazado para ver si la compensación luego era mayor... al aplazarlo tanto, descubrí el egoísmo altruista, el que más me gusta, ese que te hace sentir un enorme placer cuando "das".

Una participante de un grupo nos contaba lo bien que se sentía, cuando iba a algún país a dar, a ayudar... sin embargo, no estaba de acuerdo cuando le decían "qué buena eres... qué generosa", porque ella lo hacía para sentirse bien, de la misma manera, sin irnos muy lejos, que madre Teresa cuidaba a sus pobres. ¿Quién obtenía más a cambio? ella, con toda seguridad.

El egoísmo está en nuestra esencia, y dice el Dr. Julio Herrero en su libro "Creencias que dañan, creencias que sanan", que es el origen de la bondad verdadera, que hace posible los actos más generosos y las formas más elevadas de amor.

Trabajar con el egoísmo, deshojar la creencia de que es algo malo, nos alivia de la culpa. Ser egoísta es ser generoso, amarse a uno mismo es la única manera de amar a los demás. El Dalai Lama lo dice "sé inteligentemente egoísta" y el afamado psiquíatra nos lo recuerda,¡gracias doctor!

almufuentes@gmail.com

viernes, 5 de abril de 2013

Con un enorme respeto hacia el Dios de cada uno...



Desearía que las religiones no nos separaran a los seres humanos, que no nos hicieran mirarnos como si fuéramos marcianos enajenados con mantras, vírgenes, túnicas o inciensos.

Recuerdo hace ya 15 años que vino a cenar a mi casa un matrimonio judío. Estábamos hablando sobre el proceso de inseminación artificial al que tal vez tendría que someterme en el futuro, cuando ella, muy relajada me preguntó: y qué piensa tu Dios de ésto?... de pronto, me vi sacudida por una pregunta que jamás esperé, yo nunca me había planteado pedir permiso a nadie por éste asunto. Además, sentí que su Dios y el mío eran diferentes, me sorprendió darme cuenta de que judíos y católicos estábamos tan lejos los unos de los otros que no supe ni que contestar. Me quedé mirándola con una inmensa curiosidad, ¿cómo sería su Dios?... me imaginé a un Dios para ella y a otro para mi, estarían de acuerdo los dos Dioses??? mi niña festiva sonrió imaginando una pelea de Dioses por mi posible inseminación...

Creo, que ésta vivencia, entre otras, me hizo decidir mirar con respeto a todas las religiones y no meterme bajo el manto de ninguna.

almufuentes@gmail.com